EL CÁNCER DE MAMA EN LA MUJER
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EL CÁNCER DE MAMA EN LA MUJER
El cáncer es una enfermedad que se caracteriza por la reproducción acelerada y anormal de las células de alguna parte del cuerpo. Cuando se pierde el control natural de la velocidad de reproducción de las células, se generan tumores (masas, abultamientos) que al presentar un carácter agresivo y adquirir capacidad para la invasión de otros órganos del cuerpo, se denominan tumores cancerosos. El cáncer de mama consiste en un crecimiento anormal y desordenado de las células de éste tejido, es la aparición de estos tumores malignos en alguna parte de los senos, también llamados glándulas mamarias. Esta enfermedad puede afectar a ambos sexos.
La mama en la mujer está formada por una serie de glándulas mamarias, que producen leche tras el parto, y a las que se les denomina lóbulos y lobulillos. Los lóbulos se encuentran conectados entre sí por unos tubos, conductos mamarios, que son los que conducen la leche al pezón, durante la lactancia, para alimentar al bebé. Las glándulas (o lóbulos) y los conductos mamarios están inmersos en el tejido adiposo y en el tejido conjuntivo, que, junto con el tejido linfático, forman el seno. A modo de muro de contención, actúa el músculo pectoral que se encuentra entre las costillas y la mama. La piel recubre y protege toda la estructura mamaria.
El sistema linfático está formado por recipientes y vasos o conductos que contienen y conducen la linfa, que es un líquido incoloro formado por glóbulos blancos, en su mayoría linfocitos. Estas células reconocen cualquier sustancia extraña al organismo y liberan otras sustancias que destruyen al agente agresor.
Si las células del cáncer del seno llegan a los ganglios linfáticos debajo del brazo y continúan creciendo, éstas harán que se inflamen los ganglios. Una vez que las células cancerosas han alcanzado estos ganglios, tienen mayores probabilidades de propagarse también a otros órganos del cuerpo.
Masas benignas en los senos
La mayoría de las masas en los senos son benignas, es decir, que no son cáncer. Los tumores benignos del seno son crecimientos anormales, pero no se propagan fuera del seno y no ponen en riesgo la vida. Pero algunas masas benignas en los senos pueden aumentar el riesgo de desarrollar cáncer del seno en una mujer. Con frecuencia, estas masas resultan ser el resultado de cambios fibroquísticos. Los quistes son sacos llenos de líquido. La fibrosis es la formación de tejido cicatricial. Estos cambios fibroquísticos pueden causar inflamación y dolor en el seno. Los senos pueden sentirse con protuberancias y en ocasiones presentan una secreción clara o ligeramente turbia del pezón.
Importancia de detectar el cáncer del seno en sus inicios
El objetivo de los exámenes para detectar el cáncer del seno en sus primeras etapas consiste en encontrar el tumor canceroso antes de que empiece a causar síntomas.
Las pruebas y exámenes de detección tienen el propósito de encontrar una enfermedad, como el cáncer, en las personas que no tienen ningún síntoma. La detección temprana significa la aplicación de una estrategia que resulte en un diagnóstico más temprano de cáncer del seno.
Los tumores cancerosos del seno que se encuentran porque causan síntomas tienden a ser mayores, y tienen más probabilidades de haberse ya extendido más allá del seno. En cambio, los que se encuentran durante los exámenes de detección suelen ser más pequeños y estar aún confinados al seno.
El tamaño y la extensión del cáncer del seno son los factores más importantes para establecer el pronóstico (expectativa) de una mujer que padezca de esta enfermedad. Detectar un cáncer del seno lo antes posible aumenta en gran medida las probabilidades de que el tratamiento tenga éxito. No hay duda de que las pruebas de detección temprana del cáncer del seno salvan miles de vidas cada año, y que muchas más pudieran salvarse si un número aún mayor de mujeres y sus proveedores de atención médica aprovecharan dichas pruebas.
Técnicas para el diagnóstico de cáncer de mama
Mamografía: una radiografía del seno que sigue siendo el diagnostico estándar para detectar el cáncer de mama. Se recomienda como chequeo de rutina para las mujeres de 40 o más años de edad, pero a aquellas que tienen historia de cáncer en la familia se les recomienda comenzar a hacerse mamografías a una edad más temprana. Una mamografía de diagnóstico examina los tejidos del seno más atentamente cuando una mamografía de rutina se detecta un área sospechosa.
Tomografía CT o CAT (CT o CAT scan - Tomografía Axial Computarizada): utiliza los rayos X y un sistema giratorio para obtener imágenes detalladas del cuerpo.
MRI (Imagen de Resonancia Magnética - IRM): utiliza una combinación de energía magnética y ondas de radio.
Miraluma: aprobada por la FDA para ser utilizada además de la mamografía. Se inyecta un tinte nuclear en el tobillo y luego se utiliza una cámara para examinar los tejidos del seno.
Tomografía Ósea Nuclear: substancia radioactiva intravenosa que se concentra en los vasos sanguíneos que podrían ser cancerosos.
Tomografía PET (Tomografía por Emisión de Positrón): puede mostrar el metabolismo y la actividad del cáncer.
Ultrasonido: utiliza ondas sonoras de alta frecuencia. También se le llama sonograma.
Otras técnicas de diagnóstico
Auto-examen del seno (sigla en inglés BSE): es un examen físico del seno que se hace usted misma. Aunque los expertos no están de acuerdo sobre cuan eficaz es el auto-examen del seno para detectar el cáncer de mama, no es mala idea hacérselo una vez al mes para familiarizarse con la textura normal de sus senos.
Examen clínico de los senos (sigla en inglés CBE): es realizado por un médico o enfermera. A partir de los 20 años, las mujeres deberían hacerse un examen clínico de los senos cada dos o tres años. Las mujeres de 40 o más años de edad deberían hacérselo cada año.
Lavado ductal (Ductal Lavage): un procedimiento relativamente nuevo; con succión se extrae fluido del pezón antes de lavar los conductos lácteos con un líquido que se envía al laboratorio para ser analizado. Puede utilizarse en combinación con una técnica de imágenes.
Oncotype DXT: dos estudios sobre el Puntaje de Recurrencia con la Prueba Oncotype DXT han demostrado que esta técnica no sólo cuantifica la posibilidad de recurrencia distante del cáncer de mama en mujeres con cáncer de mama Etapa I-II de nodo negativo y receptores de estrógeno (ER) positivo, sino que también pronostica la magnitud de los beneficios que se pueden obtener con tamoxifen o quimioterapia . El puntaje de recurrencia se basa en la expresión de 21 genes, incluyendo aquellos que se relacionan con la proliferación, invasión, HER-2 y ER. La recurrencia se califica en una escala de 0 a 100 donde 0 a 17 es considerado bajo riesgo; 18 a 30 riesgo intermedio y 31 a 100 alto riesgo. Se eligieron estos puntos límite basándose en los resultados de un estudio del Proyecto Nacional sobre Cirugía Auxiliar del Seno e Intestinos (National Surgical Adjuvant Breast and Bowel Project - NSABP)
Fuente:http://www.senosayuda.org.ve
http://www.sociedadanticancerosa.org/2006/web/contenido.asp?id=1093&p=0
Cajomar
La mama en la mujer está formada por una serie de glándulas mamarias, que producen leche tras el parto, y a las que se les denomina lóbulos y lobulillos. Los lóbulos se encuentran conectados entre sí por unos tubos, conductos mamarios, que son los que conducen la leche al pezón, durante la lactancia, para alimentar al bebé. Las glándulas (o lóbulos) y los conductos mamarios están inmersos en el tejido adiposo y en el tejido conjuntivo, que, junto con el tejido linfático, forman el seno. A modo de muro de contención, actúa el músculo pectoral que se encuentra entre las costillas y la mama. La piel recubre y protege toda la estructura mamaria.
El sistema linfático está formado por recipientes y vasos o conductos que contienen y conducen la linfa, que es un líquido incoloro formado por glóbulos blancos, en su mayoría linfocitos. Estas células reconocen cualquier sustancia extraña al organismo y liberan otras sustancias que destruyen al agente agresor.
Si las células del cáncer del seno llegan a los ganglios linfáticos debajo del brazo y continúan creciendo, éstas harán que se inflamen los ganglios. Una vez que las células cancerosas han alcanzado estos ganglios, tienen mayores probabilidades de propagarse también a otros órganos del cuerpo.
Masas benignas en los senos
La mayoría de las masas en los senos son benignas, es decir, que no son cáncer. Los tumores benignos del seno son crecimientos anormales, pero no se propagan fuera del seno y no ponen en riesgo la vida. Pero algunas masas benignas en los senos pueden aumentar el riesgo de desarrollar cáncer del seno en una mujer. Con frecuencia, estas masas resultan ser el resultado de cambios fibroquísticos. Los quistes son sacos llenos de líquido. La fibrosis es la formación de tejido cicatricial. Estos cambios fibroquísticos pueden causar inflamación y dolor en el seno. Los senos pueden sentirse con protuberancias y en ocasiones presentan una secreción clara o ligeramente turbia del pezón.
Importancia de detectar el cáncer del seno en sus inicios
El objetivo de los exámenes para detectar el cáncer del seno en sus primeras etapas consiste en encontrar el tumor canceroso antes de que empiece a causar síntomas.
Las pruebas y exámenes de detección tienen el propósito de encontrar una enfermedad, como el cáncer, en las personas que no tienen ningún síntoma. La detección temprana significa la aplicación de una estrategia que resulte en un diagnóstico más temprano de cáncer del seno.
Los tumores cancerosos del seno que se encuentran porque causan síntomas tienden a ser mayores, y tienen más probabilidades de haberse ya extendido más allá del seno. En cambio, los que se encuentran durante los exámenes de detección suelen ser más pequeños y estar aún confinados al seno.
El tamaño y la extensión del cáncer del seno son los factores más importantes para establecer el pronóstico (expectativa) de una mujer que padezca de esta enfermedad. Detectar un cáncer del seno lo antes posible aumenta en gran medida las probabilidades de que el tratamiento tenga éxito. No hay duda de que las pruebas de detección temprana del cáncer del seno salvan miles de vidas cada año, y que muchas más pudieran salvarse si un número aún mayor de mujeres y sus proveedores de atención médica aprovecharan dichas pruebas.
Técnicas para el diagnóstico de cáncer de mama
Mamografía: una radiografía del seno que sigue siendo el diagnostico estándar para detectar el cáncer de mama. Se recomienda como chequeo de rutina para las mujeres de 40 o más años de edad, pero a aquellas que tienen historia de cáncer en la familia se les recomienda comenzar a hacerse mamografías a una edad más temprana. Una mamografía de diagnóstico examina los tejidos del seno más atentamente cuando una mamografía de rutina se detecta un área sospechosa.
Tomografía CT o CAT (CT o CAT scan - Tomografía Axial Computarizada): utiliza los rayos X y un sistema giratorio para obtener imágenes detalladas del cuerpo.
MRI (Imagen de Resonancia Magnética - IRM): utiliza una combinación de energía magnética y ondas de radio.
Miraluma: aprobada por la FDA para ser utilizada además de la mamografía. Se inyecta un tinte nuclear en el tobillo y luego se utiliza una cámara para examinar los tejidos del seno.
Tomografía Ósea Nuclear: substancia radioactiva intravenosa que se concentra en los vasos sanguíneos que podrían ser cancerosos.
Tomografía PET (Tomografía por Emisión de Positrón): puede mostrar el metabolismo y la actividad del cáncer.
Ultrasonido: utiliza ondas sonoras de alta frecuencia. También se le llama sonograma.
Otras técnicas de diagnóstico
Auto-examen del seno (sigla en inglés BSE): es un examen físico del seno que se hace usted misma. Aunque los expertos no están de acuerdo sobre cuan eficaz es el auto-examen del seno para detectar el cáncer de mama, no es mala idea hacérselo una vez al mes para familiarizarse con la textura normal de sus senos.
Examen clínico de los senos (sigla en inglés CBE): es realizado por un médico o enfermera. A partir de los 20 años, las mujeres deberían hacerse un examen clínico de los senos cada dos o tres años. Las mujeres de 40 o más años de edad deberían hacérselo cada año.
Lavado ductal (Ductal Lavage): un procedimiento relativamente nuevo; con succión se extrae fluido del pezón antes de lavar los conductos lácteos con un líquido que se envía al laboratorio para ser analizado. Puede utilizarse en combinación con una técnica de imágenes.
Oncotype DXT: dos estudios sobre el Puntaje de Recurrencia con la Prueba Oncotype DXT han demostrado que esta técnica no sólo cuantifica la posibilidad de recurrencia distante del cáncer de mama en mujeres con cáncer de mama Etapa I-II de nodo negativo y receptores de estrógeno (ER) positivo, sino que también pronostica la magnitud de los beneficios que se pueden obtener con tamoxifen o quimioterapia . El puntaje de recurrencia se basa en la expresión de 21 genes, incluyendo aquellos que se relacionan con la proliferación, invasión, HER-2 y ER. La recurrencia se califica en una escala de 0 a 100 donde 0 a 17 es considerado bajo riesgo; 18 a 30 riesgo intermedio y 31 a 100 alto riesgo. Se eligieron estos puntos límite basándose en los resultados de un estudio del Proyecto Nacional sobre Cirugía Auxiliar del Seno e Intestinos (National Surgical Adjuvant Breast and Bowel Project - NSABP)
Fuente:http://www.senosayuda.org.ve
http://www.sociedadanticancerosa.org/2006/web/contenido.asp?id=1093&p=0
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